Qué tipos de formación continua existen para mantener a una plantilla actualizada

Qué tipos de formación continua existen para mantener a una plantilla  actualizada

La formación continua es una modalidad formativa compuesta por actividades y programas de aprendizaje de forma teórica y práctica que se suele realizar por medio de diferentes tipos de formación continua especializada.

En las empresas, consiste en un conjunto de acciones formativas desarrolladas para mejorar las cualificaciones, los conocimientos y las competencias de los trabajadores. Pero también se puede extender a personas que se forman para buscar empleo.

 Se utiliza para mejorar la capacidad de adaptación, la competitividad, actualizar los conocimientos y facilitar el acceso al mercado laboral a desempleados, trabajadores y empresas por medio de varias líneas de actuación.

Tipos de formación continua

1.    Formación bonificada o programada

Dentro de los tipos de formación continua en la empresa, la formación bonificada es la que se da de manera más habitual.

Consiste en una serie de cursos ofrecidos por centros de formación privados y públicos, los cuales son gestionados a través del SEPE en colaboración con la FUNDAE que tienen como objetivo el desarrollo de nuevos conocimientos dentro de las empresas a fin de hacer el mercado laboral más eficiente y activo.

La Seguridad Social, a través de la Fundación Estatal para la formación en el empleo (FUNDAE), ofrece a las empresas bonificaciones para la ejecución de actividades formativas y de reciclaje profesional.

Puesto que estas ayudas tienen como objetivo cubrir necesidades específicas de aprendizaje, pueden ser llevadas a cabo tanto a través de la empresa como a través de un centro especializado o mediante la petición individual de un trabajador interesado.

La principal ventaja de esta formación bonificada de empleados es que es, como su propio nombre indica, es bonificada, y de esta forma, las empresas tienen la posibilidad de mejorar las competencias de sus trabajadores sin la necesidad de abonar un importe adicional, por lo que los cursos de formación bonificada se presentan como una opción excelente para conseguir un aumento de la productividad.

El crédito disponible para formación bonificada es anual y de carácter variable, ya que depende de las cotizaciones de los trabajadores en el año anterior. Es importante que la empresa esté pendiente de ejecutar el crédito que le corresponde, pues estas ayudas no son acumulables ni se pueden recuperar.

Esta formación puede ser presencial, semipresencial u online y existe una gran libertad para seleccionar los contenidos, el lugar y la fecha de realización.

Este tipo de Formación Continua ayuda a los trabajadores de las empresas a que continúen formándose a través de Cursos Oficiales, Expertos y Másters Profesionales que permiten a los trabajadores adquirir una mayor competencia profesional para el desempeño de sus funciones, así como ampliar su currículum académico con Titulaciones de carácter oficial reconocidas en el ámbito internacional.

2.      Formación subvencionada

La formación subvencionada es aquella que de por sí no tiene ningún coste. La principal diferencia que guarda con la bonificada es que esta no es ofrecida a los empleados de una empresa, sino a las personas que cumplen con una serie de requisitos. Estos los deciden las entidades que ofrecen y organizan los cursos; entidades públicas y organizaciones sindicales y empresariales.

La formación subvencionada puede estar dirigida a desempleados o jubilados que cumplan los requisitos, pero también a empleados, por lo que es considerada también uno de los tipos de formación en la empresa. 

3.    Formación colaborativa

Este es uno de los tipos de formación en la empresa que se imparten de forma interna y consiste en organizar sesiones formativas impartidas por los propios empleados de cada una de las áreas de la compañía. De esta forma, conseguimos que entre ellos se transmitan las nociones básicas de su área. Esta formación es utilizada para aumentar la comunicación entre los trabajadores, ya que de esta forma interactúan entre ellos.

La idea es que, al compartir un propósito común, los alumnos de distintos “niveles”, departamentos, experiencia o años en la empresa se beneficien unos de otros y aprendan de una forma más completa las destrezas necesarias para desempeñar su labor.

También permite conocer de cerca el trabajo de los compañeros, un aspecto que sin duda favorecerá el entendimiento y el trabajo en equipo.

Por INESEM | 24 noviembre 2020 | Qué es Formación Programada | 0 Comentarios
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